Ingredientes:
- 500 gramos de tomate natural para hacer salsa
- 1 pimiento verde
- 1 diente de ajo
- Aceite de oliva para freír
- 200 gramos de queso Mozzarella rallado
- Una pizca de albahaca y orégano
- Sal
Preparación:
- Cortamos las berenjenas en rodajas de 10 centímetros, y las ponemos a remojo con agua y sal durante 20 minutos.
- Cortamos la cebolla, el pimiento verde y el ajo en brunoise (cuadraditos pequeños) y sofreímos el conjunto con un poco de aceite de oliva en una sartén. Cuando la cebolla tome color añadimos el tomate natural troceado y dejamos que se cocine durante 15 minutos.
- Pasamos esta salsa por el pasapurés y la volvemos a calentar en una sartén o cazuela. Cuando comience a hervir ponemos a punto de sal y si hiciera falta añadimos también una cucharada de azúcar o una sacarina para eliminar el punto de acidez del tomate. Damos a la salsa de tomate un toque de aroma con el orégano y la albahaca.
- Escurrimos las rodajas de berenjenas del agua de remojo y las secamos con un trapo de cocina. Las cocinamos en una cazuela con agua y sal durante 15 minutos en un hervor continuo. Las sacamos del agua de cocción y una vez escurridas, las introducimos en una fuente de horno y las salseamos con la salsa de tomate.
- Espolvoreamos ligeramente con queso rallado e introducimos en el horno a 250°C hasta que se gratine la superficie.